Queridos amigos,
llegó el día, ya es día diez, justo el día en que hago mi obra de teatro, que por cierto se titula así, La extrañeza de escuchar el silencio, no me desagrada el titulo, tiene algo de encanto, pero ya he comentado alguna vez por aquí que no me apetece demasiado (nada) hacer esta obra.
Ayer fui al ultimo ensayo y no podía entrar en la escena, me sentía tan rara..., se dio cuenta la profesora y me dijo que me quedara fuera, que mirase el ensayo desde otro punto y me incorporase cuando me viera capaz, no fue mala idea.
Lo malo es que cuando estoy tan tensa y tan nerviosa exploto y zas!! me salió toda la rabia por la boca, diciéndole que no me gustaba nada lo que había pasado, que queríamos dejar la obra pero por culpa de otra persona nos vimos metida en ella tanto una amiga como yo, vamos, que me pasé un poquito, lo reconozco.
Otro desastre es el día, me he levantado y llovía tanto que creía que no podría salir hoy de casa, actuábamos a las ocho, de repente nos cambian la hora a las seis, la gente tenia sus taxis pedidos, ojala puedan cambiar la hora, lo que digo, desastres.
Se supone que cuando acabe la actuación me iré con mis padres que vendrán a verme y me da vergüenza, me pondré colorada, seguro, pero me iré despues a mi playa, espero que salga el sol por donde sea.
Besos algo desanimados.
Anita antes que nada, gracias por pasarte por mi blog y dejar un comentario.
ResponderEliminarQué tal ha ido la obra, a qué te ha salido genial!
besito
Hola, gracias por contestarme tan rápido.
ResponderEliminarDespués de tantos desastres que me pasaron ese día no salió la cosa tan mal, no me puse nerviosa, bastante raro, hable con total tranquilidad, hice mi presentación y quedo graciosa, ya he quedado como la chica que tiene tantos novios...
Invente un dialogo algo divertido sobre mi y a la gente le gustó y si, salió el sol, así que he disfrutado de playa que tanto me gusta.